Una de repostear de las largas... que voy a estar fuera hasta la semana que viene.
Posteado originalmente en: Diario de un Ideolingüista
Fecha: 30/08/2005
Quisiera hoy dedicar la entrada del diario a los números en diversas lenguas.
Muchas veces se piensa que los números forman parte de esas palabras de las lenguas que permanecen en ellas durante toda su evolución diacrónica y que rara vez son prestadas o tomadas de otras lenguas. La verdad es que esto desde luego no es así, ni los números y su estructura son inmutables ni es tan raro que sean prestados.
Por ejemplo, estamos acostumbrados al sistema de numeración decimal (y si eres informático al binario, octal y hexadecimal), o la duodecimal en la cuenta horaria, pero hace un tiempo en Europa al parecer fue común el sistema vigesimal, y también hay en el mundo otros sistemas usados (al menos antiguamente) como el basado en el 5 o en el 7, cosa que se puede saber precisamente analizando la etimología de los números, y viendo si los números a partir de uno se basan en compuestos de los anteriores (como 5+2, o 10-1), o son prestados de otras lenguas (al adoptar el sistema decimal, por ejemplo, suele pasar que se abandonen las anteriores formas compuestas de los números).
El sistema vigesimal aún hoy en día es observable claramente en la numeración del euskera, y residualmente en el francés (con sus formas de 80 como quatre-vingts, 4x20, y 90 quatre-vingt-dix, 4x20+10, así como 70 soixante-dix, 60+10).
En euskera el sistema es totalmente regular y completo: 10 hamar, 20 hogei, 30 hogeitamar (hogei eta hamar, 20+10), 40 berrogei (berr-+hogei, 2x20), 50 berrogeitamar (2x20+10), 60 hirurogei (hiru(r)+hogei, 3x20), 70 hirurogeitamar (3x20+10), 80 laurogei (lau(r)+hogei, 4x20), 90 laurogeitamar (4x20+10).
En danés al parecer también permanece una forma de vigesimal: tyve (20), tres < tresindstyve (60) y firs < firsindstyve (80), pero su numeración es mucho más rara e irregular.
Buscando más pistas sobre esta numeración vigesimal he encontrado que también el albanés (një 1, dy 2, njëzet 20 : 1x20, dyzet: 40: 2x20) y el georgiano (ori 2, ati 10, otsi 20, ots-d-ati 30, or-m-otsi 40), a nivel de Europa, lo usan, mientras que incluso el Ainu (hotnep 20, tu hotnep 2x20: 40), en Japón, lo usa también, así como las lenguas eskimales (dialectos Inuit y Yupik) regularmente 20, 20+10, 2x20, 2x20+10, etc. (además de contar 6: 5+1: VI, 7: 5+2: VII, 8: 5+3: VIII y 9: 10-1: IX).
Según varios linguistas el origen de la numeración vigesimal en Europa puede estar en las lenguas de la supuesta familia pre-indoeuropea vascónica que se hablaba en Europa continental.
Lo curioso es que puede que el propio sistema vigesimal en el euskera sea prestado del céltico. Esto es, fueron los vascónicos los que introdujeron el sistema entre los celtas (cuyo origen indoeuropeo debería otorgarles inicialmente un sistema decimal) o fueron los celtas los que forzaron al euskera a numerar así?.
En galés medieval y galo había sistemas de numeración basados en el 20 totalmente paralelos al del euskera:
20 ugein / ugant, 30 deg ar hu / decan ugant, 40 deugein / duogant, 60 trugein / triugant, 80 petorugant.
Además, casualmente “ugein” suena muy parecido a “hogei”, jaja. Pero recordemos que ugein y ugant son formas indoeuropeas emparentadas con la latina viginte < *wigenti- < *wikemti- < *dwidekomti-. Así, pues, si las formas celtas y la vasca suenan parecidas, y estas tienen origen indoeuropeo, tendrá hogei origen indeuropeo?
Siguiendo con la forma reconstruida de 20 para indoeuropeo se me sugiere otro tema relacionado: la raíz IDE kmt- (grado cero) que según apunta todo debió significa 10 en la época más arcaica del indoeuropeo común, aunque posteriormente (con la necesidad de contar números más altos) pasó a ocupar la posición de 100, convirtiendo a 10 en la décima parte de esta (de-kemt-). Sin embargo, que significara 10 es visible en el hecho de que la raíz en grado -o- está presente en todas las terminaciones de decenas: 20 dwi-de-komti-, 30 tri-komti-, 40 kwetwor-komti-, 50 penkwe-komti-, 60 seks-komti-, 70 septem-komti-, 80 okto-komti-, 90 newn-komti-, y finalmente en 100 en grado -e- (apofonía indoeuropea –e-/-o-) 100 kemt-.
Pasemos ahora a comentar los numeros de otra familia, europea también, y relacionada con la indoeuropea: la urálica.
Tomemos como sus exponentes el húngaro y el finés (sus mayores lenguas en lo que se refiere a hablantes, 10 mill. y 5 respectivamente, historia, literatura, naciones y también practicamente las dos más alejadas entre sí, en realidad no, porque las más alejadas son las samoyédicas).
Húngaro:
1 egy , 2 kettö’ (két), 3 három , 4 négy , 5 öt , 6 hat , 7 hét , 8 nyolc , 9 kilenc , 10 tíz
Finés:
1 yksi , 2 kaksi , 3 kolme , 4 neljä , 5 viisi , 6 kuusi , 7 seitsemän , 8 kahdeksan , 9 yhdeksän , 10 kymmenen
Hacer notar aquí que la ö’ del húngaro es una ö larga, que se marca con dos ‘’ encima, y todas las vocales largas húngaras llevan la tilde ´, gy es una d palatal, a es una vocal entre la a y la o (en inglés what, god, hot, etc.), ny es una n palatal (ñ), c es la africada ts.
A simple vista pude ver que los 4 primeros números provienen del proto-urálico:
Yksi < *ykte- > *ekt- > egy
Kaksi < *kakte- > *kekte- > kettö’, két
Kolme < *kol@m- > *hol@m- > három
Neljä < *nedjä- > *nédj- > négy
Se sabe que la k- urálica inicial en húngaro da regularmente h- (como fin. koti, casa, hún. ház, fin. kala, pez, húng. hal), así que el número 2 resulta conflictivo porque mantiene la k- inicial, puede que por la estructura de sílaba cerrada. Las lenguas úgricas khanty y mansi documentan las formas intermedias con kh-, y también tienen k- en 2.
-l- intervocálica de *kol@m se convierte en -r-, fenómeno muy típico en todas las lenguas del mundo, puesto que suenan practicamente igual en esa posición (véase por ejemplo que los japoneses no distinguen esos dos sonidos, y palabras del euskera como Álava > Araba, Ayala > Aiara). La @ de esa reconstrucción es una vocal indeterminada que se perdió, puede que una schwa.
Lo que se puede apreciar es que el finés es claramente muy conservador con respecto al proto-urálico (mientras que la mayoría del resto de lenguas urálicas tienen evoluciones bastante grandes a nivel fonético).
Con una observación más imaginativa se ve que los números del 5, 6 y 7 también pueden estar relacionados:
Viisi < *witte- > *wet- > öt (la forma intermedia *wet > vet está documentada en khanty, lengua úgrica)
Kuusi < *kutte- > *kot- > hat
Seitsemän < *seitte- > *heit- > hét
Este último es pura especulación, no sé si está documentado el cambio s- > h-, pero posiblemente no sea correcto, y no he visto reconstrucciones que se atrevan con un 7 proto-urálico, ya que hay bastante diversidad en este número (por ejemplo, en khanty es tapet, y en mansi sat, lo cual hace dificil reconstruir incluso el proto-úgrico, pero en mansi se ve relación con *seitte-, no?).
De todas formas el número siete es practicamente idéntico el indoeuropeo septm!! Así que puede tratarse de un préstamo temprano. Comparar: 7 ide. septm, georg. shvidi, eusk. zazpi, acadio sebe, árabe sab'ah, hebreo sheba', ethiop. seb'atu, egipcio ant. 'safxaw, guanche satti, tuareg sah, dravídico noreste satte:, etrusc. semph, proto-kam-sui (familia tai) set, y algunas lenguas austroasiáticas también tienen sat, sa:t, satta, sa:ta, sát (birhor, korwa, bhumij, juang, car).
Los números 8 y 9 en finés son claramente 10-2 y 10-1 respectivamente, y en úgrico hay variedad también. Todo ello parece indicar que la numeración urálica común llegaba sólo hasta el 6 o el 7.
El número 10 es otro tema, puesto que las lenguas urálicas se agrupan en torno a varias formas, pero sin compartir necesariamente términos similares en lenguas más cercanas de su subfamilia. En el caso del húngaro tíz suena muy indoeuropeo dekemt- (> teg@m- > protogerm. *tehun, armenio clásico tasn, prestada al húngaro desde *teĝe-) , mientras que el finés kymmenen provee una raíz fínica tal que *kymt- (por la gradacioón consonántica finesa que convierte -nt- y -mt-, y otros grupos, en -nn- y -mm- al añadirle sufijos al sustantivo), cuya relación con el *komti- ide. anteriormente comentado es innegable (todas las lenguas de la rama fínica poseen este origen para 10, y también de la familia volgaica la lengua mordvin con “kemen”, y tal vez la lengua samoyédica selkup con “köt”).
En la familia úgrica sólo el húngaro parece poseer este préstamo (posterior al de *komti- desde luego) indoeuropeo, porque khanty tiene yang (totalmente aislada a simple vista) y mansi lov (esta relacionada con otras urálicas, ahora lo comento). En la subfamilia pérmica parece que acompañan al húngaro y poseen “das” para 10, con origen similar (armenio tas).
La tercera opción para 10 existente en las lenguas urálicas debe de ser algo como *logwi- compartida por todas las lenguas Saami (las cuales por cierto son las que poseen mayor vocabulario ajeno a la familia urálica, cuya explicación es que sus hablantes son étnicamente distintos a éstos, y que adoptaron la lengua urálica, pero poseen un substrato ártico importante, como los samoyedos): logi, love, etc. y la lengua volgaica mari, lu (y la úgrica mansi: lov).
Las lenguas samoyédicas (excepto selkup) tienen para 10 una palabra que empieza por bi- y similares.
En lo que respecta a números superiores al 10, hay algunos hechos dignos de ser considerados:
En finés no hay novedades en las decenas (todas terminan en -kymmentä) (aunque del 11 al 19 son un poco especiales, ya que se le añade una terminación distinta que significa precisamente "añadir", taisto, porque la terminación de 10 ya se usa en las decenas).
En húngaro del 11 al 19 son muy regulares (tizen+número), pero lo especial radica en que el número 20 y 30 tienen nombres específicas: húsz y harminc respectivamente, que puede que tengan que ver con két (<*kakte-) y harom (<*kol@m). Y las decenas de la 40 a la 90 son regulares con una terminación en -ven (de origen incierto ¿?).
Tanto en finés como en húngaro el número 100 parece ser prestado de una lengua indoeuropea satem (lenguas que evolucionaron *kemt- hacia sat@m, palabra del persa avéstico, entre las que se incluyen las indoiranias, las balto-eslávicas, cuyo contacto con las urálicas es muy probable, y el armenio): finés sata 100 y húngaro száz 100 (comparar con ruso "sto"). Entonces, los urálicos no tenían necesidad de contar hasta números tan altos como 100 en la época remota (como sucedía con los indoeuropeos más arcaicos).
Apasionante, verdad?
Volviendo al euskera, un rápido apunte en lo que se refiere a los números inferiores a 10: 2 bi y 6 sei es muy probable que tengan un origen indoeuropeo, 2 dwi- (prefijo latino bi-, de la forma adverbial *dwis > bis, "dos veces", lat. bis bina "dos por dos", eusk. binaka "de dos en dos"), 6 seks (castellano seis). No obstante, existe otra forma para 2 en euskera que se aleja de la similitud indoeuropea: biga, con lo que puede tener un origen autóctono.
El número 9, en cambio, tiene un análisis igual que el finés (y que el eskimal, y los números latinos IX): 10-1 bederatzi, que dicen viene de bade-eratsi (quitar uno), siendo 1 bat, *bade- en vascónico antiguo.
Y se aisló por ahí también para el número 1 la forma *eka, deducible de hamaika 11, hamar-eka, 10+1. En la familia de lenguas índicas es común esa raíz para el número 1, mientras que no tiene un origen indoeuropeo (puesto que éste era *oinos o *sem- > proto-helénico *hem-, lat. singular, simil, inglés some), en sánscrito éka, pali eka, sinhalés eka, maldivo eke, y en general todas las lenguas índicas tienen hoy en día una forma como ek- o ak- para 1. Podría tener su origen en las lenguas dravídicas, pero tampoco parece ser así, ya que éste es *oru, por lo visto. Un misterio, por qué aparecen números sin origen claro de la nada en familias de lenguas bien conocidas, eh?
Ya para terminar, y aprovechando que actualmente estoy leyéndome el libro sobre la lengua de Koguryo, pongo aquí el material en bruto sobre la numeración de esta lengua que no deja lugar a dudas de su parentesco con la numeración japonesa originario (por cierto, que el japonés tomó prestado en la Edad Media todos los números del chino, y hoy en día tiene números japoneses y sinoides usados en distintos contextos, para que luego digan que los números no se prestan).
Koguryo mir 3 : Japonés mi-, mit- (SJ san)
Koguryo ütsi 5 : Japonés itsu- (SJ go)
Koguryo nan 7 : Japonés nana-, nano- (SJ shichi)
Koguryo t@k 10 : Japonés to-, tô- (SJ jû)
SJ: Sino-japonés
Agradecimientos a http://zompist.com/numbers.shtml